Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Exponentes de la
Sala Arquetipos 1995 1998

Miguel Fernández Cid
Fragmento del prefacio del catálogo
Galería Alcantara Conde Duque 1992.

… ruido sordo de metáforas: el estudio como laboratorio de imágenes, pero un laboratorio particular que nos hace creer que las estatuas crecen o hacen sonidos. Respecto a esto último, Gaston Bachelard publicó dentro de un Papel de Reflexión que nuestro artista va en la dirección de la obra de Chillida. Alcantara no ha seguido esta línea, aunque habla de cada material como una referencia a personas notablemente cercanas, a un miembro de la familia. Los bloques de Colmenar, Calatorrao o alabastro pueden percibir una forma tanto como la técnica para sacar dos sin afectar el bloque. Es real. 

En ese sentido, podemos mencionar las obras de arte expuestas, una preferencia por el gusto por los materiales y la búsqueda de maximizar el potencial, lo que lo lleva a fusionar dos formas diferentes en cada escultura. Cuando se ven desde diferentes ángulos, las cabezas y las figuras de los pájaros cambian más de lo habitual en las esculturas independientes.

Sobre todo, Alcantara es un escultor de estudio, de esos que buscan el enfrentamiento, incluso inmediato, con los materiales; esa piedra que a Miguel Ángel le resultaba intolerable porque lo alejaba de la escultura. De este contacto mantenido y continuo se deriva un adelgazamiento sostenido de formas, estilo y autogobierno.

A pesar de las diferencias en los métodos inherentes al uso recurrente de cualquiera de los materiales, toda su obra de arte tiene una esencia similar. José Marín Medina, que fue el primero en reconocer la calidad de su producción, lo vio con una claridad asombrosa: «Con fuertes raíces expresionistas y más sobrias, Alcantara maduró hasta convertirse en una talla directa en los terrenos de Brancusi: rodear la piedra y darle forma. Así, esto provoca un «proceso constante de autogeneración de formas». Y esta es la noción que inspira la producción de Alcantara y, por lo tanto, puede ocurrir repetidamente, retomar intentos anteriores o cesar con la misma fuerza. el tipo de escultor comprometido con la búsqueda de la imagen, pero es consciente de la importancia de afirmar la esencia de cada representación y las líneas que rompen, aunque debamos «partir de uno mismo», como señaló Brancusi.

(Adaptado por JMS)