Exponentes
de la Sala Mitos

Tomás Paredes
Fragmento del prefacio del catálogo
Galería Andrés Alcantara Antonio Prates 2001

Del mismo modo, cabezas de pensadores de custodios y guardianes, estrellas y ángeles, asteroides donde la piedra se convierte en emociones sin perder jamás su fuerza. El orador real, esculturas con una clara conexión con las estructuras y las intenciones, no es un arte intencional, sino esquemas y formas geométricas que reclaman precisión, pureza y la sutileza del violín.

Tallado directo, sin uso de cientos de bocetos previos, sin más ayuda que los límites de los pensamientos; talla directa, viva, piezas encajadas en la traducción más valorada de contemporaneidad, progreso, diseño, ejecución, resultados, desprecio por el vacío, la nada, el arte desarraigado.

Muy pocos escultores, expertos en luz, trabajan la piedra con el mismo refinamiento técnico y grandiosidad que Alcantara, un escultor alejado de las tendencias, dedicado a las raíces de la contemporaneidad y, al mismo tiempo, a lo más natural, inspirado y profundo. artista arraigado en la actualidad. Es un asceta resguardado en su «atelier», en su casa, contigo, con Ceselli, con el convoy virtualmente fluvial de Madariaga, con el piano sin cuerdas o el violín roto de Hölderlin y Fijman. Como otros artistas, estos últimos tallados con la voz de Dante hicieron piezas de luz sólida, lucidez vibrante y tempo respetable.

(Adaptado por JMS)